Montipora Spongodes
Nombre científico: Montipora spongodes
Nombre común en inglés: Velvet stone coral
Nombre común en español: Montipora spongodes
Familia: Acroporidae
Origen: Indo Pacífico
Parámetros ideales:
Salinidad: 1023 a 1025
Temperatura: 23 a 26º C
Calcio: 400 a 450 ppm
Alcalinidad: 8 a 12 dKH
Magnesio: 1200 a 1350
Estroncio: 8 a 10
PH: 8.10 a 8.40
Información, cuidados y curiosidades: El coral Montipora spongodes fue descrito por Bernard en 1897.
Puede encontrarse en la parte occidental del Océano Índico, Japón y Australia. Los arrecifes alrededor de Australia en los que puede encontrarse son la Gran Barrera de Arrecifes, la isla Lord Howe y Port Denison.
Este coral prefiere hábitats en el arrecife como zonas rocosas de mareas y también áreas a gran latitud, aunque allí no son tan comunes.
Los corales Montipora pueden vivir a más de 10 metros de profundidad, en las crestas de los arrecifes, en arrecifes oceánicos cristalinos y lagunas turbias por los sedimentos. Aunque están ampliamente extendidos, es más común encontrarlos en aguas tranquilas a profundidades medias.
Este coral tiene un esqueleto muy poroso y ligero. Es una especie con forma de plato de coral SPS. Es incrustante, con una base en forma de plato. Forma colonias con crecimiento en platos verticales, con crestas que se desarrollan como columnas. Su “superficie” es lisa y los coralites que albergan a los pólipos están espaciados. Los pólipos son pequeños, uniformes y tienen una apariencia aterciopelada. Este coral puede ser de color rosa, gris oscuro, café oscuro, verde o crema pálido, y generalmente tiene los pólipos de un color contrastante.
Es moderadamente fácil de mantener pues acepta un amplio rango de intensidad de iluminación. A diferencia de los Acropora, que pertenecen también a la familia, los corales Montipora no se estresan tan fácilmente y son más resistentes al blanqueamiento y a las enfermedades. Algunos creen que esta resistencia se debe a que sus pólipos están profundamente incrustados en su esqueleto. También es un coral fácil de propagar. Los especímenes salvajes no se adaptan muy bien al cautiverio.
En la naturaleza, los corales Montipora han desarrollado diversas estrategias para alimentarse. Por medio de una relación simbiótica con las algas zooxantelas reciben parte de los nutrientes que necesitan. También capturan organismos planctónicos, partículas microscópicas de comida y absorben materia orgánica disuelta en la columna de agua. En cautiverio pueden alimentarse con zooplankton, plancton o algún alimento especial para organismos filtrantes una vez a la semana. Los copépodos, artemias y sus nauplios son demasiado grandes para que ellos los puedan ingerir.
Hay que asegurarse que este coral no entre en contacto con otros corales o algas, pues es un coral delicado y siempre acaba perdiendo las guerras químicas.
Estos corales son macho y hembra, y pueden reproducirse sexual o asexualmente. En la naturaleza se reproducen sexualmente liberando huevecillos y esperma al mismo tiempo, lo que resulta en un huevecillo fertilizado que entonces se convierte en una larva plánula de nado libre. Eventualmente la larva plánula se establece en el sustrato y se vuelve un plankter. Entonces forma un pequeño pólipo que empieza a secretar carbonato de calcio y se desarrolla un coral. Esta larva es extremadamente vulnerable a la depredación, por lo que muy pocas sobreviven. Estos corales también se reproducen asexualmente. En la naturaleza los Montipora se extienden debido a la fragmentación producida por las tormentas o accidentes.
La propagación en cautiverio de estos corales es relativamente sencilla. Lo primero es escoger cuidadosamente un coral que no muestre ningún signo de enfermedad. Entonces, simplemente hay que cortarle un trozo de al menos 2” de largo y pegarlo en una roca o base. Para esto puede utilizarse resina epóxica o cianoacrilato. La mucosidad que excreta el coral al ser cortado no debe entrar en contacto con los demás corales, y se recomienda utilizar guantes y material desinfectado para fragmentar.
Los Montipora son corales pacíficos, pero hay que tener cuidado con los cangrejos. Ellos son depredadores oportunistas, con la excepción de algunos cangrejos simbióticos o comensales.
Estos corales generalmente son resistentes a las enfermedades, pero aún así pueden contraer las mismas enfermedades que adquieren los demás corales SPS cuando no están bien cuidados y mantenidos. Es común que presenten crecimientos parecidos a tumores, pero no son dañinos, solamente son feos.
En la naturaleza, pueden encontrarse estrellas marinas y otros detrívoros en la base del coral. Hay que revisarlos cuidadosamente para eliminar a los organismos indeseados, especialmente si el coral proviene de la naturaleza. Un organismo indeseado problemático que puede venir escondido en el coral es un nudibranquio del género Aeolid. Este nudibranquio se comerá el coral desde el a base hacia arriba.
No deben introducirse al acuario caracoles Limpet pues son devoradores de Montipora y Acropora. El gastrópodo Magliopsis y el gusano plano Prosthiostomum también son devoradores de Montipora.
Si el coral presenta recesión de tejido, solo hay que cortarle la parte enferma. Hay que cortar también parte del tejido sano para asegurarse de eliminar por completo la enfermedad. También hay que mantener a raya las cianobacterias y las algas con la corriente de agua fuerte.
Fuentes del artículo:
Animal world
Origen de la imagen:
http://www.cvreefers.org
Colaboración de:
Jessica Romero Saldivar (AtOmIcFaRt)