Leptojulis Chrysotaenia
Nombre científico: Leptojulis chrysotaenia
Nombre común en inglés: Ochreband wrasse
Nombre común en español: Labrido de franja ocre
Familia: Labridae
Origen: Océano Indo-Pacífico
Parámetros ideales:
Salinidad: 1023 a 1025
Temperatura: 23 a 26º C
Calcio: 400 a 450 ppm
Alcalinidad: 8 a 12 dKH
Magnesio: 1200 a 1350
Estroncio: 8 a 10
PH: 8.10 a 8.40
Información, cuidados y curiosidades: El pez labrido de franja ocre Leptojulis chrysotaenia fue descrito por Randall y Ferraris en 1981.
Es originario del este del Océano Indo-Pacífico, de la zona que abarcan Sri Lanka, la costa este de Tailandia, Lombok y Bali en Indonesia.
Vive cerca del sustrato, sobre sustratos de arena, cascajo coralino y a una profundidad que va de 4 a 30 m.
Generalmente es solitario o forma parejas cuando es juvenil.
Es obligatoriamente un pez limpiador y picotea los crustáceos parásitos de los demás peces pequeños.
Los juveniles se distinguen de las demás especies con una sola franja por el ocelo en la aleta dorsal y los adultos por la franja en ángulo que tienen en el hocico y las mejillas.
Su coloración corporal general es blanco rosáceo, tiene dos franjas horizontales de color ocre que recorren su lomo y desde la punta del hocico hasta la base de su aleta caudal.
Se desconoce cuánto tiempo puede llegar a vivir.
Este pez puede llegar a medir alrededor de 11 cm.
Este pez es extremadamente difícil de mantener en cautiverio, aunque es muy dócil y tranquilo, de todos los Labropsis, este pez es el que menos posibilidades tiene de sobrevivir en un acuario. Aunque se alimente bien y se le proporcione una dieta adecuada, morirá en un par de semanas o un mes debido a la desnutrición.
A diferencia de los peces limpiadores “facultativos” como los gobios o los camarones, los labridos limpiadores dependen completamente de los parásitos, piel muerta y demás cosas que remueven de sus “clientes”. Esta actividad de limpieza es su principal fuente de alimento.
Puede adaptarse y aceptar alimentos preparados, pero morirá debido a la desnutrición.
Hasta mediados de los 90’s, los labridos limpiadores eran considerados peces benéficos para el acuario. Cientos de miles de estos pequeños peces fueron capturados para satisfacer la demanda de los acuaristas. Pero de estos cientos de miles de peces, solamente unas cuantas decenas sobrevivieron y prosperaron en cautiverio.
Conforme se fue conociendo más acerca de sus requerimientos especializados y se supo de la extrema dificultad para mantenerlos en cautiverio, estos peces nunca más han vuelto a ser considerados adecuados para un acuario marino. Nunca deben ser adquiridos pues es fomentar que se sigan depredando sus poblaciones naturales y que sigan siendo condenados a una horrible muerte por desnutrición.
El pez Larabicus quadrilineatus es carnívoro. Es un pez limpiador cuyo estilo de vida consiste (y depende) de una relación simbiótica con otros peces. Están clasificados como de alimentación obligada, lo que quiere decir que obtienen virtualmente toda su nutrición consumiendo los parásitos, tejido muerto, mucosidad y otros desechos de los cuerpos, aletas, hocicos y agallas de otros peces.
Lo ideal sería mantener a este pez en un acuario de arrecife con muchos y diversos peces con ectoparásitos, básicamente para proporcionarle suficiente alimento natural para mantenerse sano.
En su hábitat natural se alimentan constantemente al realizar sus actividades normales de servicio de limpieza.
Este pez es solitario y a diferencia de otros labridos solamente puede ser observado en parejas y no formando grandes grupos.
Es un pez pacífico y beneficioso pues mantiene a otros peces libres de parásitos. Mantiene una relación simbiótica con otros peces, que le proporcionan nutrición e incluso cierto grado de protección contra las tendencias depredadoras naturales de los peces más grandes. Este pez incluso puede limpiarles el hocico a las anguilas. Los peces acuden a su “estación de limpieza” frecuentemente para ser limpiados.
Cuando no tiene “clientes” esperando, él realiza una curiosa “danza” como “publicidad” para atraerlos o para calmarlos y le permitan realizar su trabajo correctamente.
No se puede determinar visualmente el sexo de estos peces, y nunca han sido propagados en cautiverio.
Fuentes del artículo:
Animal world, Saltaquarium y Fishbase
Origen de la imagen:
http://www.francescoricciardi.com
Colaboración de:
Jessica Romero Saldivar (AtOmIcFaRt)